"Si un país tiene los presidentes que se merece, no debe haber otra lógica para un partido político.
Pues bien... la renuncia que Verna presentó hoy terminó por dejar a cargo de la más importante silla del PJ pampeano nada menos que a Carlos Aragonés, uno de los dirigentes más nefastos de La Pampa.
Autotitulado “padrino” de Rubén Marín, Aragonés pasó a la historia como un buchón en épocas en que el terrorismo de Estado cobraba por víctimas a los “zurdos trapos rojos”, según él mismo pronunciaba.
Macartista de aquéllos, Aragonés se afanó todo para salir de pobre –como señala un artículo publicado por la revista El Fisgón– y llegó a apropiarse de al menos 40 inmuebles.
Privilegios de presidir la Fundación Eva Perón y recibir fondos a rolete, en un lugar y en un momento en que la Justicia y sus hombres están muy dispuestos a mirar para otro lado.
La última edición del mensuario Lumbre, por si hacía falta más, publica invalorables testimonios fotográficos que permiten ir entendiendo quién es Aragonés: aparece en pose amical con el genocida Ramón Camps, nada menos.
Ese es el honorable presidente que tiene el PJ. Y asume nada menos que en la Semana de la Memoria, que recuerda un nuevo aniversario del patético golpe de Estado del 24 de marzo del ’76.
En una fecha tan especial para quienes defienden los derechos humanos, en el PJ asume la presidencia un desecho humano".
Publicado por: elsoretestierno.blogspot.com
Pues bien... la renuncia que Verna presentó hoy terminó por dejar a cargo de la más importante silla del PJ pampeano nada menos que a Carlos Aragonés, uno de los dirigentes más nefastos de La Pampa.
Autotitulado “padrino” de Rubén Marín, Aragonés pasó a la historia como un buchón en épocas en que el terrorismo de Estado cobraba por víctimas a los “zurdos trapos rojos”, según él mismo pronunciaba.
Macartista de aquéllos, Aragonés se afanó todo para salir de pobre –como señala un artículo publicado por la revista El Fisgón– y llegó a apropiarse de al menos 40 inmuebles.
Privilegios de presidir la Fundación Eva Perón y recibir fondos a rolete, en un lugar y en un momento en que la Justicia y sus hombres están muy dispuestos a mirar para otro lado.
La última edición del mensuario Lumbre, por si hacía falta más, publica invalorables testimonios fotográficos que permiten ir entendiendo quién es Aragonés: aparece en pose amical con el genocida Ramón Camps, nada menos.
Ese es el honorable presidente que tiene el PJ. Y asume nada menos que en la Semana de la Memoria, que recuerda un nuevo aniversario del patético golpe de Estado del 24 de marzo del ’76.
En una fecha tan especial para quienes defienden los derechos humanos, en el PJ asume la presidencia un desecho humano".
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